Bienvenidxs de nuevo tras muuuucho tiempo a un nuevo post. Esta vez, intentaré ser más asiduo en los posts, no quiere decir que no hayamos hecho actividades, pero son muchas cosas las que hacer :). Bien, tras excusarme, vengo con un post de un viaje reciente, en el que, por primera vez, salimos de nuestro país para realizar una actividad.
Esta vez nos fuimos a Marrakech, decidimos organizar un viaje para coronar el pico más alto de la zona y además descubrir su cultura e historia.
Contacté con un guía de la zona a través de redes sociales, de habla española (a medias) pero fácil de entender.
Me gustó mucho el precio, por lo que decidí organizar el viaje.
Finalmente, fuimos 9 personas al viaje, 8 personas españolas y una persona de Inglaterra.
En el precio no entraba el transporte hasta el país (Marrakech) por lo que cada persona se "tenía que buscar la vida" para ir. Por suerte, desde Valencia, había vuelo directo a Marrakech, ¿pero qué ocurrió? que a 1 mes aproximadamente de la fecha, nos cancelaron el vuelo de ida (desconocemos los motivos) y tuvimos que buscar un nuevo vuelo y desde otro destino.
2 personas que residen en Cuenca, Ramón y Mª Jesús, decidieron salir desde Madrid con la misma compañía de vuelo, ya que no se les cobraba la diferencia de vuelo. Las demás personas de Valencia, decidimos salir desde Barcelona, ya que nos salía un poco más económico el transporte hasta la ciudad Condal.
Las persona de Valencia teníamos el vuelo el día 17 de marzo a las 18:00, Bego, Héctor y Verónica, acudieron en autobús, mientras que Laura y yo, acudimos en tren. Laura y yo llegamos a las 14:00 y los demás sobre las 16:00 al mismo aeropuerto. Las personas de Cuenca + Elena (Valencia) salieron de Madrid de madrugada y el Jueves 17 ya estaban por a mañana en Marrakech esperándonos.
La documentación a aportar para Marrakech en época COVID fue la siguiente; prueba PCR negativa con máximo 48h antes, pasaporte en vigor con al menos 6 meses de validez, pasaporte de vacunación COVID con pauta completa, 1/1 o 2/2.
Realmente, yo estaba preocupado, porque tenía una pauta completa de 1/1 pero mi pasaporte COVID caducó hace meses, ya que hace 1 año que lo obtuve, y tras hablar con mi médica, consulado marroquí etc, la solución que me dieron fue que me hicieran un informe sobre que había pasado el COVID 2 veces y por eso tenía 1 vacuna solamente, bueno, un jaleo :). Finalmente, pude entrar al país y fue un alivio, ya que tenía muchas ganas de ir.
Llegamos al país a las 21:30 de la noche, pasamos todos los controles de seguridad, nos dirigimos a realizar los cambios de moneda de € a Dirhams (moneda del país), y conseguimos salir del aeropuerto.
A la salida nos estaban esperando nuestros compañeros que llegaron de Madrid sujetando un cartón con mi nombre en este caso (Víctor), como si fuésemos personas importantes, pero fue un bonito gesto, al igual que gracioso, junto con los guías y el organizador Mohamed, y la chica que llegó de Inglaterra varios días antes para estar en el país visitándolo para después unirse a nosotrxs.
Fuimos sin esperar al parking a dejar todas las maletas y mochilas dentro de la furgoneta-autobús que nos estaba esperando para poner rumbo al pueblo Imlil, en donde comenzaríamos el trekking al día siguiente.
La furgoneta era relativamente nueva, súper moderna, cómoda y todos flipamos al verla por dentro, ya que parecía una discoteca con las luces de colores. Tardamos alrededor de 1h 15 min en llegar al pueblo de Imlil en donde pasaríamos la noche en uno de los alojamientos de la zona. Nos recibieron con la cena, (cerca de las 00 de la noche) con uno de los platos típicos de allí, el couscous, que estaba.... sin palabras, con pan típico de allí también, ensalada... 0 pegas a la comida, y té, que allí se toma como si en España tomases agua para todo, pues allí pasa con el té. Té para desayunar, té para comer, té para el snack de la tarde, té para cenar... pero muy rico todo.
Nos designaron las habitaciones y nos fuimos a descansar pronto, ya que al día siguiente comenzábamos el trekking y estábamos cansadxs del viaje.
Día 1. Viernes 18 de Marzo.
Nos levantamos temprano, a eso de las 8:30, desayunamos, recogimos todo y nos hicimos la mochila del trekking, lo que no necesitásemos en la ruta, lo colocaríamos en la otra mochila que es la que llevarían las mulas hasta e refugio. Sobre las 9:45 partímos de un altitud de 1.900m o algo similar hacia el refugio les Mouflons, a 3.200m de altitud. Una ruta de 13 km con 1.200 de desnivel positivo. La ruta era cada vez más bonita adentrándose en el atlas africano y dejando atrás el pueblo de Imlil.
En la ruta hay muchas casetas o puestos en donde comprar chocolatinas, snacks, camisetas o zumos de naranja naturales que te los exprimen en el momento, los cuales están de rechupete!!! Nada que envidiar a naranja marroquí a la valenciana.
En ruta, hicimos una parada en Café Chamharouch, no es una cafetería al más puro estilo italiano ni mucho menos, pero es una zona de varias casas con sus "terrazas" para poder tomar algo tranquilamente, como refrescos, los mencionados zumos de naranja, o simplemente relajarte mientras contemplas el paisaje precioso de la zona.
Continuamos la ruta hasta que finalmente llegamos al refugio Les Mouflons, justo al lado, hay otro refugio llamado Neltner o algo así. Una vez llegamos al refugio sobre las 16:00h, nos tenían preparada la comida que ansiábamos, una super ensalada de pasta con verduras de primero, y de segundo un Tajín (recipiente de allí) de bolas de carne y lentejas, y para beber como os comentaba antes, té, pero si querías agua, la pedías sin problema. RECUERDA BEBER AGUA EMBOTELLADA EN ESTOS PAÍSES, un apunte. De postre, fruta, como plátanos o naranjas.
Allí en el refugio me encontré a Carlos, un chico catalán con el que estuve hablando por móvil, ya que él estaba en el mismo caso que yo acerca de las vacunas y demás, y nos hablábamos para darnos opiniones y noticias. (Su contacto me lo pasó el mismo guía de allí). Sabíamos que nos encontraríamos en el refugio. Iba acompañado de 2 amigos más.
Nos fuimos a descansar a nuestra habitación, en la cual estábamos los 9 alojados más los 3 chicos catalanes, en total, 12 personas en literas, la verdad, no muy cómodas, bastante duras pero sabíamos en el país que estábamos y a lo que íbamos, por lo tanto no pusímos pegas. Nos propusímos a darnos una ducha, el refugio parecía un iglú del frío que hacía dentro (nunca he estado en un iglú), excepto en los comedores en donde estaban las chimeneas de leña. Cogímos turnos para ducharnos y la ducha debía ser rápida para que el agua llegase caliente para todo el mundo, una vez salías de la ducha lo mejor era secarte rápidamente y vestirte para no morir de hipotermia, recuerda que estábamos a 3.200m, con todo lleno de nieve y en invierno.
Una vez nos duchamos todos, a las 20:00 era la hora de la cena, la cual nos pusieron de primero una sopa típica y de segundo carne, siempre con el pan típico y sus salsas etc. En este país no solo comen couscous (otro dato).
Nos quedamos en una de las salas caldeadas por la chimenea un tiempo después de la cena para conversar entre nosotros, hablar con los guías etc, después nos fuimos a dormir pronto porque el cansancio estaba haciendo mella.
Pasamos una noche muy mala, ya que el dormir con tanta gente en la misma habitación pues no todos duermen placenteramente y a la primera; unos roncan, otros se levantan al baño, otros se mueven... en definitiva, nadie pudo dormir excepto la persona que roncó toda la noche jaja. Nadie se enfadó con esa persona, al final uno no decide qué hacer o qué no hacer. Al día siguiente nos esperaba la cumbre del Toubkal, y no sabíamos como íbamos a estar.
Día 2. Sábado 19 de Marzo
Sonó la alarma a las 7:00, ya estábamos despiertos y nos empezamos a vestir rápidamente, porque hacía MUCHO frío al amanecer, Héctor había sufrido una insolación el día anterior y decidió no subir y quedarse durmiendo, la verdad que parecía un tomate en la cara y tenía fiebre.
Los demás nos fuimos a desayunar; leche en polvo, té, crema de cacahuete, quesos, pan, café soluble... después del desayuno nos preparamos para el gran día, a pesar de no dormir, teníamos muchas ganas de poder hacer cumbre, ya que lo deseamos y por eso hicimos el viaje.
Comenzamos a andar sobre las 9:00 rumbo a la cumbre más deseada por nosotros (de ahí el viaje). Camino al Toubkal!
Desde el minuto 0, comenzamos a ascender, no llegamos a tener ninguna bajada para poder descansar, a la hora de ruta, paramos a descansar para tomar un snack o incluso poder quitarnos ropa, ya que era invierno y todo estaba nevado, pero en la subida siempre hace calor.
Continuamos con la subida por el cañón que da acceso al pie del Toubkal, todo era sombra hasta que a eso de las 10:30 de la mañana, nos comienzan a azotar en la cara los primeros rayos de sol tan deseados por nosotros, ya que hacía buen día, pero el sol...siempre calienta un poco :)
Una vez pasado el cañón, llegamos a los pies del Toubkal, en donde hacemos otra parada para volver a quitarnos o poner "capas" de ropa, comer... para afrontar la última cuesta y con más cantidad de nieve hasta tocar el techo más alto.
La región estaba llena de Chovas piquigualdas, sobre todo en las montañas. ¿Que cómo sé el nombre de estas aves? Porque busqué en internet, ya que nos parecieron peculiares, ya que son como los cuervos pero con pico amarillo y patas naranjas.
Justo en este punto, entramos en los 4.000m de altitud.
Tomamos la última cuesta con pies de plomo, si resbalabas había buena caída deslizándote. La presíon atmosférica a 4.000m de altitud y la falta de oxígeno se notaba.
Algunos no habíamos pasado de hacer montañismo a más de 3.400m y algunos otros lo sufrieron más ya que no habían hecho alta montaña nunca.
Seguímos ascendiendo y por fiiinnnn llegamos a la cimaaaaaaa 😍
Tras descansar y contemplar las vistas, que como podéis ver en las fotos salió un día fabuloso. Comenzamos a descender, con el sol ya fuera por completo, teníamos mucho calor y comenzamos a quitarnos capas hasta quedarnos con 1 camiseta de manga larga o con una chaqueta fina encima. La bajada fu espectacular porque la nieve tras el sol era nieve polvo que nos llegaba hasta las rodillas casi, bajábamos corriendo algunxs, con hambre y deseando llegar al refugio para comer, el sol nos azotaba la espalda y los brazos, hacía mucho calor para la temporada en la que estábamos.
Tras llegar al refugio, observamos el track grabado en el reloj, y sabíamos que era bestial la ruta de hoy porque ya lo contemplábamos mientras andábamos, pero cuando te detienes, entras en estado de calma, y lo asimilas, te das cuenta de todo de mejor forma 😂. Una ruta que en 4km de ascensión, nos plantamos con 950m de desnivel positivo. En tan solo 4km!!!!!!!!! 😳😳. Estando ya en el refugio, nos pusimos a comer la comida que nos tenían preparada, teníamos un hambre... y como siempre, buenísima! Después, nos pegamos una ducha, nos aseamos y fuimos a descansar un rato antes de la cena, la cual sería pronto, ya que teníamos que irnos a acostar temprano porque al día siguiente nos quedaba el día más duro del viaje. Subir dos cimas de 4.000m, y por la tarde bajada al pueblo de Imlil (misma ruta que la subida del primer día al refugio).
Día 3. Domingo 20 de Marzo
Última media jornada en las altas montañas del atlas. Nos levantamos a las 6 de la mañana, ya que la jornada iba a ser larga. Tras el desayuno comenzamos a caminar rumbo al primer 4.000 con nombre Ras (4.083), con una cantidad de nieve en nuestro camino...espectacular , nos cubría hasta casi las rodillas en algunos tramos. A mitad de camino, Bego, se tuvo que dar media vuelta y volver al refugio porque se encontraba mal, le dio una insolación la jornada anterior en el Toubkal, pero afortunadamente no bajó sola al refugio, Ramón la acompañó para prevenir.
Nos faltaba muy poquito para llegar a la primera cima, simplemente nos quedaba sobrepasar una cresta vertical.
Tras pasar la cresta, a los 30 min hacemos cumbre, algunas personas del grupo se empezaban a encontrar mal y casi no hacen cima, pero la ilusión pudo con todo y lo consiguieron.
Llegados a este punto, con algunas personas cansadas, los guías nos propusieron avanzar con uno de ellos al otro pico (a escasos 20min) o bajar al refugio. 4 de los 7 que subimos, nos veíamos fuertes para hacer otra cima así que allá que fuimos, los demás, bajaron.
Para llegar a la otra cima simplemente había que bajar 50 metros y volver a subir otra rampa de unos 150m o así y ya teníamos otra cumbre a nuestros pies.
Hafida, Vero, Laura, Omar y yo, hicimos cima! y super contentos, así que rápidamente pusimos rumbo al refugio porque el día no había acabado.
Una vez en el refugio, a las 14h en punto, nos abrazamos todos y nos dimos la enhorabuena, y Bego, por suerte estaba bien y mucho mejor :)
Tras comer, preparamos las maletas y las dejamos preparadas para que las recogiesen y entregasen a las mulas que nos las llevarían de vuelta a Imlil.
Comenzamos la vuelta a Imlil a eso de las 16h, y fuimos muy fugaces, ya que en 3:30h estábamos en Imlil, creo que teníamos prisa por llegar.
Una vez en Imlil, nos alojaron en otro alojamiento diferente, super chulo, merendamos té y palomitas y nos pegamos una ducha, ya que la cena la íbamos a pasar en la casa de Mohamed que nos había invitado. Para cenar nos pusieron una sopa con ensalada, y de segundo carne con patatas fritas!!!!
Tras la cena, nos fuimos a "nuestra" casa a dormir porque estábamos bastante cansadxs, y al día siguiente nos quedaba "turistear". Nos tocó despedirnos de Brahim, que él se tenía que marchar. Le dimos las gracias por su trato con nosotrxs y por su ayuda entodo momento. Seguro que nos volveremos a ver!
Día 4. Lunes 21 de Marzo
Nos levantamos por la mañana, y tras cerrar maletas, desayunar etc, nos recoge el minibús para trasladarnos al mercado del Valle de Orika. Un mercado que hacen los Lunes y en donde acude muchísima gente a hacer sus compras y vender sus productos. Tras venir de las montañas en las que no había tanta aglomeración de gente, por un momento nos sentimos os agobiados, porque la gente en seguida te quiere vender sus productos y te persiguen hasta el infinito, pero bueno, nos adaptamos pronto a la situación. Tras hacer nuestras compras y visitar la zona, ponemos rumbo a la capital.
Tras llegar a Marrakech, hacemos check in en nuestro riad, super chulo, con un patio interior muy cuidado y un sonido de pájaros enlatados (sonidos falsos).
Aquí íbamos a pasar nuestra última noche en el país.
Tras acomodarnos, nos vamos a visitar la ciudad, con mucha gente por cada rincón. Nos fuimos directamente a los más turístico y lo que mueve realmente Marrakech, al zoco o mercado del centro, con miles de comercios de cualquier producto y diversas callejuelas en las que es fácil perderse. Hicimos nuestras respectivas compras de souvenirs para la familia o para nostroxs propios y fuimos a tomarnos algo a una terraza con unas vistas espectaculares, sobre todo si ves la puesta de sol como tuvimos la suerte nosotros de verla. Las 8 personas que fuimos, no pedimos s un mojito sin alcohol (recuerda que es un país musulmán y no beben alcohol (supuestamente).
Tras este break en nuestro día, nos fuimos a buscar algún restaurante en el que cenar, y justo al lado del mercado, encontramos uno súper bien de precio, en el que cenamos muy bien, y salimos a lo equivalente de 8€/persona... impensable en cualquier lugar de Europa. Nada más terminar de cenar nos fuimos al hotel porque estábamos cansadxs y además, no es recomendable andar por la noche sobre estas ciudades, aun que éramos un grupo, no nos apetecía, y al día siguiente tocaba madrugar para volver al aeropuerto.
Día 5. Martes 22 de Marzo
Nos levantamos temprano a eso de las 8:30 para desayunar en la azotea del riad, que tenía una terraza súper bonita y amplia. Desayunamos tortitas con mermelada, mantequilla, café...
Al acabar de desayunar algunas personas del grupo salieron temprano a ultimar las compras en las tiendas, ya que a las 11 venía Mohamed a recogernos para llevarnos al aeropuerto.
Cuando vino a recogernos, nos tocó despedida de Hafida, una chica nacida en Argelia pero que residía en Inglaterra, y me contactó a través de la app Meetup para venir al viaje. Ella se quedaba algunos días más allí.
El trayecto de Marrakech-aeropuerto es de unos 15-20 min. Cuando llegamos nos despedimos de Mohamed y nos fuimos directamente a hacer el check in y a esperar nuestro vuelo que salía a las 14:00. Poco más que contar... Seguiremos organizando viajes a Marruecos porque ha sido una experiencia... indescriptible.
Doy las gracias a todo el mundo que nos ha cuidado en aquel país y al grupo tan genial que se formó con la gente que vino al viaje.
Por muchos más viajes de este estilo.
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Saludos ✌🏽🤚